Mediante el cumplimiento del programa nacional de detección y atención de la hipoacusia que hoy rige en nuestro país ( Ley nacional 25415) se pueden diagnosticar pérdidas auditivas moderadas, severas y profundas en los primeros meses de vida. 

El primer paso es la realización de un sencillo estudio de otoemisiones acústicas en las primeras 48 hs de vida que se realiza en los hospitales y clínicas de maternidad.

Las otoemisiones acústicas que se le realizan al bebé en los primeros días de nacido es un proceso sencillo y confiable, que resulta rápido, totalmente seguro y sin molestias para el bebé.

La tecnología que se usa para examinar la audición de su bebé involucra colocarle una pequeña sonda con cabezal de goma en el oído. Luego, un aparato reproducen sonidos suaves y se mide y registra la respuesta auditiva a ellos.

Probablemente, durante todo este examen, su bebé podrá estar plácidamente dormido y se podrá obtener el resultado a la mayor brevedad.

Si por algún motivo no se le practicó este examen a su bebé recién nacido antes de salir del hospital, usted debe hacérselo saber a su pediatra para que le indique dónde realizársela.

En ocasiones, algunos bebés que realizaron su prueba de audición en los primeros días de nacido o en los controles posteriores, precisan un seguimiento si no pasaron la prueba.

Si se sospecha que su bebé tiene alguna dificultad auditiva se deberá actuar rápidamente para arribar a un diagnóstico certero.